No sé porqué ahora te recuerdo.
Hace tanto que no sé de vos que creí que te había olvidado.
Intuyo que en definitiva nunca te fuiste, sino que estuviste guardado al fondo de mi corazón esperando el momento más adecuado para salir.
Hace tanto que no sé de vos que creí que te había olvidado.
Intuyo que en definitiva nunca te fuiste, sino que estuviste guardado al fondo de mi corazón esperando el momento más adecuado para salir.
Pero...
¿Por qué hoy?
¿Por qué ahora?
¿Por qué hoy?
¿Por qué ahora?
Nunca estuve tan sola como ahora, pero no sé si tu compañía me ayuda o me hace ver lo triste y solitaria que soy desde que no estás.
¿Era necesario recordarme mi soledad en este mundo?
Siento que me ahogo en penas que no tienen cura,
que lloro por cosas que no van a suceder,
que ruego a dioses que no me escuchan.
que lloro por cosas que no van a suceder,
que ruego a dioses que no me escuchan.
Trato de tocar el cielo con las manos y me quedo sin manos.
Trato de correr hacia la libertad y no encuentro mis piernas.
Trato de gritar para que alguien me escuche y no tengo voz.
Trato de borrarte de mi mente pero mi corazón se niega.
Trato de correr hacia la libertad y no encuentro mis piernas.
Trato de gritar para que alguien me escuche y no tengo voz.
Trato de borrarte de mi mente pero mi corazón se niega.
Era imprescindible que estuviese así de sola para recordarte.
Para recordar esos momentos que vivimos juntos,
cuando éramos felices,
cuando no había nadie que nos separara.
Para recordar esos momentos que vivimos juntos,
cuando éramos felices,
cuando no había nadie que nos separara.
Creímos que era lo mejor no vernos más pero,
te extraño,
a veces,
cuando estoy sola,
como hoy.
te extraño,
a veces,
cuando estoy sola,
como hoy.
Esta soledad comenzó de repente,
empezó por los dedos de los pies y fue subiendo,
a las rodillas,
la cadera,
el corazón,
hasta llegar a la cabeza.
empezó por los dedos de los pies y fue subiendo,
a las rodillas,
la cadera,
el corazón,
hasta llegar a la cabeza.
Y ahí empecé a recordarte.
Y en ese instante comencé a llorar.
En ese segundo mi vida perdió sentido.
Y en ese instante comencé a llorar.
En ese segundo mi vida perdió sentido.
Es ineludible el nombrarte al viento,
le susurro palabras al oído de tu fantasma para ver si vos me escuchás,
dondequiera que estés.
le susurro palabras al oído de tu fantasma para ver si vos me escuchás,
dondequiera que estés.
Espero que vos cuando estás solo también me extrañes.
Ojalá algún día estés solo al mismo tiempo que yo,
y así podríamos extrañarnos en el mismo momento,
y sentirnos un poco más cerca,
aunque sea a través de esta soledad,
que nos va extinguiendo poco a poco.
y así podríamos extrañarnos en el mismo momento,
y sentirnos un poco más cerca,
aunque sea a través de esta soledad,
que nos va extinguiendo poco a poco.